En este dibujo tuve en cuenta la experiencia del cuadro anterior e intenté no repetir los mismos fallos. Aunque parezca un dibujo hecho sin pensar, ordené un poco las ideas que me iban surgiendo y las intenté aplicar despacio para no arrepentirme (como me paso en el dibujo anterior). Creo que, al menos un poco, si que conseguí darle un poco más de orden que en el anterior y la verdad es que me gusta bastante como me quedó.

En esta clase nos iniciamos con las ceras pastel y éste fue el primer dibujo que realicé con ellas. Comencé a hacerlo con una actitud positiva, pues me gustaba la idea de incluir el color. Empecé bastante convencida de lo que estaba haciendo pero, llegó un momento en el que el dibujo se me fue un poco de las manos, dando lugar a esta urdimbre de líneas. El resultado no es de los que más me gusta la verdad.

En el tercero, las instrucciones ya fueron un poco más precisas. Primero nos dijeron que pintáramos todo de negro para, posteriormente, incluir el blanco con ciertas pautas simples. Al comienzo, no pillé muy bien la idea de lo que los profesores querían exactamente que hiciésemos, pero a medida que avanzaba el en dibujo me fui metiendo cada vez más y más en él y me dejé llevar por completo (hasta el punto de pintar con los ojos cerrados). Fue un cuadro que disfruté mucho y además, me gusta como quedó.

Al realizar la segunda pintura mi cuerpo y mi mente ya se iban acostumbrado a todo aquello, nuevo hasta entonces. Cada vez me sentía mejor y disfrutaba más. No sabía qué pintar, ni cómo empezar; pero una vez empezado el cuadro, cada trazo me iba llevando a otro y otro. Empecé pintando casi la totalidad del fondo de negro muy suave y, sobre él inicie una serie de movimientos continuos siguiendo el mismo patrón (aquí ya incorpore la chunky blanca). El resultado obtenido no fue como me esperaba pero tampoco me disgusta.

Este fue el primer cuadro que pintamos en DAI, y en mi caso, la primera vez que lo hacía, o por lo menos de esta manera (un papel tan grande, con materiales nuevos, de pie ante el papel blanco...). Pedro nos dijo que liberásemos nuestro cuerpo y que nos enfrentásemos a este nuevo reto implicando todas las partes de nuestro cuerpo; la música nos ayudo bastante. La verdad es que me lo pase genial; me sentí liberada a la par que feliz.